Las redes sociales y sus matices no convencionales
Las redes sociales y sus matices no convencionales (I)
Por Rosa Castellanos García / 06-12-2014
Apenas comenzaron las manifestaciones sociales en Hong Kong, las redes sociales las bautizaron como la Revolución de los Paraguas . Tal como ocurrió en la Primavera Árabe , estas aplicaciones informáticas se convirtieron en líder digital para movilizar multitudes y protestar contra gobiernos, similar a lo sucedido en el norte de África, Oriente Medio, Venezuela y Ucrania.
La integración de blogs, páginas web, wikis, transmisiones en vivo e intercambios de video, ha sido suficiente para cambiar de manera decisiva –en algunos casos– los actos socio-políticos más extremos y en otros, incentivar y mantener un ambiente de desestabilización.
No caben dudas de que las lecciones aprendidas durante la Primavera Árabe o Revoluciones de Redes Sociales , como se le llama alternativamente, han servido para calzar la actual estrategia de EE.UU. de Guerra No Convencional, para sembrar la inestabilidad en pueblos que no responden a sus intereses.
De manera que “explotar las vulnerabilidades sicológicas, económicas, militares y políticas de un país adversario” para luego “desarrollar y sostener las fuerzas de la resistencia y cumplir los objetivos estratégicos de EE.UU.”, constituyen las principales armas en la estrategia Obama.¹
Bajo este contexto, la Circular de Entrenamiento 1801 (TC-1801) “Guerra No Convencional” de las Fuerzas de Operaciones Especiales describe que las “redes especiales” cumplen funciones de “proveer información a la población, contra la voluntad del régimen en el poder” propiciando “reforzar la voluntad popular de apoyar la causa insurgente, minar la legitimidad del régimen y socavar las fuerzas de seguridad enemiga”, funciones estas muy parecidas a las de las redes sociales en los últimos años.
El enjambre en el dominio digital que provoca puede superar fácilmente las barreras geográficas, económicas y culturales. La Primavera Árabe demostró cómo estas herramientas pueden agrupar a sus usuarios digitalmente, y luego pasar a dirigir o influenciar algunos elementos de las masas físicas.
En Egipto, miles de intercambios a través de la plataforma de los 140 caracteres propiciaron una ola permanente de masas inspiradas, conectadas electrónicamente, que derrotaron a un gobierno de 30 años en el poder, en 18 días, con una “narrativa y un codazo suave”.²
Wael Ghonim, un administrador regional de marketing, creó una página en Facebook cuyo propósito era asesinar a los empresarios egipcios. Desde su página se convirtió en un elemento catalizador de la revolución.³
Más tarde, el propio Ghonim revela en su libro Revolución 2.0 sus experiencias adquiridas en la Primavera Árabe . En tan solo cuatro etapas, ese joven describe cómo se llevaron a cabo las acciones.
En una primera fase, la intención de lograr convencer a las personas de enlistarse a su página en Facebook. Segundo: lograr convencer a estos miembros de impulsar su disposición, así como su página en Facebook y los comentarios reales en esa red social. Tercero: participar en campañas de Internet, así como contribuir con diversos contenidos que resalten los talentos de los propios miembros de la página web, por ejemplo, poesía, diseño gráfico para la creación de logos y otras, y cuarta y última fase, pasar a la acción.
Es palpable que con tan solo cuatro años en menesteres no convencionales, las redes sociales ya cuentan con un amplio currículo para movilizar, organizar, reclutar, comunicarse y enlazarse en tiempo record a los empleados con métodos tradicionales.
En el conflicto sirio, se empleó la herramienta de Análisis Dinámico de la RedTwitter (DTNA, por sus siglas en inglés), que tenía como objetivo la exploración de datos y contenidos en esa red social, sobre la base de la búsqueda de palabras clave predeterminadas.⁴
A partir de la conjugación de las informaciones aportadas por esta herramienta analítica, se logró conformar “sociogramas” que permitieron estudiar la estructura de cada una de las partes en conflicto, incluyendo la oposición política y la armada. A esto se le llamó la Anatomía de la Red Siria .
En Ucrania, a partir del 27 de noviembre de 2013, el gobierno estadounidense desplegó 20 especialistas con el objetivo de realizar un estudio sobre las características de las protestas, sus participantes, exigencias, vulnerabilidades y puntos fuertes. Esos datos fueron recogidos a través de las redes sociales, llegando a conclusiones muy certeras sobre los individuos que protagonizaron las manifestaciones y el empleo de estas redes.⁵
Nada más parecido a la identificación de líderes que sean capaces de aceptar el apoyo estadounidense lo cual requiere, indica la TC-1801, “de una comprensión profunda del liderazgo de la resistencia y de su organización. El nivel de fidelidad normalmente exige un grado de observación en el terreno para conformar una evaluación objetiva”.
Referencias
2http://www.soc.mil/swcs/swmag/archive/SW2502/SW2502SocialMediaAndUW.html
3 http://www.soc.mil/swcs/swmag/archive/SW2502/index.html
4 http://www.soc.mil/swcs/swmag/archive/sw2603/sw26-03.pdf
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http://www.cubadefensa.cu/?q=node/2962
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Por Rosa Castellanos García / 09-12-2014
En Irak, el denominado Estado Islámico (EI) ha estado empleando YouTube, Twitter, Facebook e Instagram para emitir mensajes sobre sus planes futuros o compartir imágenes de armas presuntamente capturadas en acciones combativas. El gran volumen de mensajes generados, así como las imágenes y los videos transmitidos, también se utilizan para legitimar a ese grupo mediante la propaganda y afianzar su estrategia de reclutamiento de nuevos combatientes.
Por su parte, analistas estadounidenses han señalado que el estudio de estas redes sociales ha permitido conocer las áreas de operaciones de los yihadistas y obtener información sobre la estructura, organización e intereses del EI. Igualmente, ha favorecido el incremento de la precisión de los ataques de Vehículos Aéreos no Tripulados (UAV, por sus siglas en inglés) contra objetivos del EI.¹
La cúpula militar de EE.UU. ya ha puesto interés en el tema. El Laboratorio de Investigaciones Operacionales y Análisis Común del Departamento de Defensa está realizando un estudio sobre la aplicación de estas plataformas en el escenario operacional actual, integrando los datos culturales, geoespaciales y temporales obtenidos a través de las fuentes abiertas, a partir del empleo de los teléfonos celulares.²
Las Fuerzas de Operaciones Especiales (FOE) de EE.UU. también intentan adaptar esta herramienta para sus misiones no convencionales.
Por ejemplo, militares estadounidenses que han abordado el tema consideran que el empleo de las redes sociales facilitaría a las FOE realizar la Preparación de Ciberinteligencia del Ambiente (CIPOE, por sus siglas en inglés) para obtener información a tiempo real y conocer datos acerca de los líderes, los reclutados, los eventos, las normas entre otros, al mismo tiempo que evita su exposición y eliminan las limitaciones de tiempo usualmente impuestas por la presencia física en el área objetivo.³
Las fases de Guerra No Convencional (GNC), descritas en la TC-1801, nos hacen pensar que las redes sociales desempeñarían desde el principio un papel importante para crear las condiciones de factibilidad y conveniencia mediante la divulgación de mensajes y otros materiales digitales persuasivos (videos, propaganda gráfica, consignas, entre otros) que apoyen en todo momento las acciones subversivas y sicológicas desde los inicios de una campaña de GNC.
Asimismo, las FOE podrían emplear esta herramienta informática para desarrollar la fase de contacto inicial entre tal fuerza y la insurgencia en áreas de difícil acceso. Esta aplicación facilitaría el contacto a distancia y evitaría exponer a los efectivos en territorio hostil.
Parece viable también que el personal del Equipo Piloto, designado para realizar la fase de “infiltración”, emplee las redes sociales para cumplir sus misiones en la “apreciación detallada del área para ampliar su conocimiento del ambiente operacional, en particular para el “análisis del factor humano”, tal como lo enuncia la circular.⁴
Es evidente, las nuevas tecnologías informáticas han marcado una huella en los últimos acontecimientos sociales. La combinación entre lo virtual y el ambiente físico las convierte en una herramienta poderosa empleada para producir los efectos sicológicos necesarios para una aplicación exitosa de la GNC. Las opciones son ilimitadas y van más allá del alcance geográfico.
Es una pena que herramientas digitales tan novedosas sean utilizadas para fomentar la inestabilidad social y no para divulgar la sabiduría y el conocimiento de las nuevas tecnologías digitales.
El mensaje fraternal, enviado por el presidente Maduro a su homólogo Evo Morales a través de su cuenta en Twitter con motivo de la victoria boliviana en los recientes comicios y en respuesta a la dedicatoria del triunfo de Evo a Fidel y Chávez, demuestra que esta plataforma también puede ser un instrumento revolucionario para la patria americana.
Referencias
2 http://handle.dtic.mil/100.2/ADA561663/ Unconventional Warfare in Cyberspace by Colonel Everett Denton Knapp, Junior.
3 Ídem.
4 http://www.cubadefensa.cu/?q=node/2607/ Equipos pilotos ciberespaciales: adecuación virtual para la Guerra No Convencional.
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http://www.cubadefensa.cu/?q=node/2981
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